Conflicto entre Iberia y sus pilotos se intensifica cada vez más
En un entorno de crecientes quejas y acusaciones mutuas, Iberia y el sindicato que representa a sus pilotos, Sepla, no han logrado ponerse de acuerdo ni siquiera con respecto a los servicios mínimos que se ofrecerán durante las próximas 24 jornadas de huelga convocadas por ese colectivo para marzo, abril y mayo.
Así lo refiere un despacho de Europa Press que apunta que será el Ministerio de Fomento el encargado de nuevo de establecer esos servicios, que en los anteriores paros garantizaron todos los vuelos entre la Península y las islas, Canarias y Baleares; el 50% de los vuelos nacionales cuyo tiempo de viaje fuera superior a cinco horas y el 25% de los vuelos peninsulares inferiores a cinco horas, más el 50% de los vuelos con ciudades extranjeras de menos de seis horas.
Sin embargo, el conflicto ha llegado ahora al punto de que el Comité de Huelga ha enviado una carta al Departamento que dirige Ana Pastor en la que denuncia la "vulneración" por parte de la dirección de Iberia del derecho a huelga de los pilotos durante las jornadas anteriores, y la acusa de ciertas "irregularidades" en la ejecución de los servicios mínimos.
De su lado Iberia, que sigue argumentando que la creación de su filial de low cost Iberia Express no es ni siquiera cuestionable por los pilotos, basados justo en su desacuerdo con esa nueva compañía para continuar con la huelga, también ha decidido presentar una demanda contra el Sepla y el sindicato Stavla de tripulantes de cabina (TCP), que se ha sumado a los paros, ante la Dirección General de Trabajo.
En su reclamo la compañía pide que la nueva convocatoria de 24 jornadas de huelga de esos colectivos sea declarada como "ilegal" por "abusiva", pues coincidirá con períodos de la Semana Santa y de puentes vacacionales en los que Iberia suele tener gran movimiento de pasajeros.
La aerolínea, que defiende su derecho a “tomar decisiones en su gestión como cualquier empresa” y ratifica que la creación de Express no afectará a las condiciones laborales y salariales de los actuales empleados de Iberia, ha asegurado que le seguirá una demanda ante la Audiencia Nacional si la de conciliación ante la Dirección General de Trabajo no prospera.
Hasta el momento este conflicto le ha supuesto a Iberia pérdidas por 36 millones de euros, que podrían incrementarse mucho más con el nuevo calendario de paros anunciado por los pilotos.




