Venezuela: El Museo Marino de Margarita

Venezuela. La isla de Margarita es uno de los más conocidos destinos turísticos en este país. En Boca del Río, una población de la península de Macanao, está el Museo Marino de Margarita: exhibiciones de corales, estrellas marinas, erizos, esponjas, tiburones, piscinas de contacto -en las que nadan diversas especies-, acuarios virtuales e incluso el esqueleto de una ballena de 14 metros de longitud, entre otras atracciones.
El Museo Marino de Margarita, en el estado de Nueva Esparta, abrió sus puertas hace 15 años, y desde entonces su labor ha sido promover la conservación, la educación y la investigación de las ciencias que estudian los océanos.
“Este recinto representa una identificación directa con la particularidad de la Isla: la riqueza de sus aguas y los pescadores de la zona, a ellos le debemos este sitio”, explicó Bladimir Rodríguez, quien es biólogo marino y director de relaciones institucionales de este lugar, quien agregó que éste debería ser un destino obligatorio para cualquier turista que arribe a Margarita.
“La mayoría de los visitantes no conocen este museo, por ello invitamos a todos los viajeros a que disfruten de las muestras que tenemos y así contribuiremos a la cultura museística que tanto hace falta en los venezolanos”.
En las instalaciones del museo se pueden apreciar varias exposiciones distribuidas en ocho salas, en las que se muestran esqueletos de animales marinos, como tortugas, peces y otros: el más llamativo, los restos de una ballena de 14,6 metros de longitud. De igual forma, se pueden ver acuarios con corales, estrellas marinas, erizos y tiburones, entre otras especies.
Quienes visiten el lugar, también encontrarán una piscina de contacto, en la cual podrán tocar varias especies marinas. “Esta es una forma de sumergirnos en las profundidades, estando en la superficie. Nuestros visitantes tendrán la oportunidad de aprender sobre la variada fauna y flora que poseemos”, afirmó Rodríguez.
Aunado a esto, los acuarios virtuales resultan una gran opción para el disfrute de los asistentes. En ellos se recrean escenas de ecosistemas y animales, difíciles o imposibles de observar por lo inaccesible del hábitat o porque ya se extinguieron.
Además, el Museo Marino reserva un espacio para mostrar las tradiciones marineras neoespartanas, vale mencionar en las áreas de la pesca artesanal y la construcción de naves pesqueras.




