Parque Marino Costero Patagonia Austral, refugio de especies en Argentina
El área protegida preserva numerosas especies de aves al norte del Golfo San Jorge, entre gaviotas de Orlog y pingüinos de Magallanes. Fue el primer parque costero de Argentina en tener jurisdicción en el mar. Se ubica al sudeste de Chubut, entre las ciudades de Camarones, Comodoro Rivadavia y Bahía Bustamante.
Una de las propuestas turísticas que destacan a la provincia de Chubut por el avistaje de aves, las travesías náuticas y las alternativas de relax en plena naturaleza es el Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral. Es la primera área protegida del país que tiene jurisdicción en el mar al abarcar unas 130 mil hectáreas de tierras, un centenar de kilómetros de costas del Cabo Dos Bahías, la Bahía Bustamante y alrededor de 60 islas e islotes.
Ubicado al norte del Golfo de San Jorge, el parque costero es hábitat natural de 13 de las 16 especies de aves marinas que se reproducen en territorio nacional. Algunas de ellas son de características únicas en el mundo como la gaviota de Orlog y el pato vapor de cabeza blanca, elegido como referencia de la promoción turística. También se avistan allí pingüinos de Magallanes, cormoranes imperiales y de cuello negro, petreles gigantes del sur, gaviotines de diversos tipos y lobos marinos de uno y dos pelos.
Las ciudades chubutenses de referencia para una visita a esta zona protegida de la estepa patagónica son Camarones, Bahía Bustamante y Comodoro Rivadavia, una de las más importantes de la provincia por su actividad económica e infraestructura de servicios. Sitios en los que se contratan excursiones de aventura, buceo, aéreas y náuticas para disfrutar del increíble paisaje en la región costera.
Características únicas
El Parque Marino Costero Patagonia Austral preserva 79 mil hectáreas de superficie marítima, 34 mil de superficie continental y casi 19 mil de superficie insular. Si bien en la Argentina existían ya dos parques con costa marina como Monte León (en la provincia de Santa Cruz) y el Parque Nacional Tierra del Fuego (en la provincia homónima) éste es el primero que tiene jurisdicción en el Océano Atlántico.
Una de sus características más destacadas son los 100 kilómetros de costa con bahías, caletas, playas, ensenadas, restingas y arrecifes rocosos que invitan al avistaje de ballenas francas australes, orcas, delfines cruzados y toninas overas.
Allí se produce también el desove y la crianza de 38 especies de peces e invertebrados, entre los que se encuentran algunos de relevancia económica como langostinos y merluzas, y otros como pejerreyes, róbalos, salmones, tiburones y pulpos.
Se reproducen diez especies de mamíferos marinos de la Patagonia, como el lobo marino de uno y dos pelos, que tiene dentro del parque alrededor de 20 asentamientos y una población estimada de casi diez mil individuos.
Finalmente, las tierras facilitan el desarrollo de microalgas y la proliferación de bancos de bivalvos, entre almejas rayadas y mejillones, muy buscados por los pescadores artesanales.
Ruta Azul
El Parque Marino Costero Patagonia Austral forma parte de la denominada Ruta Azul, uno de los circuitos turísticos más jóvenes de la Argentina, que transita sobre la Ruta Nacional 3, entre Comodoro Rivadavia (Chubut), destacada en la región por servicios, infraestructura y un aeropuerto internacional, y Río Gallegos (Santa Cruz), desde donde se conecta a la Ruta Nacional 40, que recorre casi cinco mil kilómetros del territorio nacional.
El itinerario se extiende sobre el litoral atlántico de la Patagonia a lo largo de 500 kilómetros y visita reconocidas áreas protegidas identificadas como “parques azules” por su condición de marítimos, y en contraposición a los “parques verdes” que integran la Patagonia cordillerana. Uno de ellos es el Parque Marino Costero Patagonia Austral, cuyas ciudades cabeceras son Comodoro Rivadavia, Camarones y Bahía Bustamante.
Bahía Bustamante es un pueblo alguero, cuyas extracciones son utilizadas como materia prima para la obtención de agar-agar. Un destino turístico incipiente desde donde se realizan excursiones náuticas por las diversas islas que integran el parque.
Camarones es una ciudad portuaria ubicada a orillas de la bahía homónima, también punto de partida del denominado Corredor Bioceánico. Allí, se desarrollan actividades de pesca, trekking y buceo, así como circuitos culturales por tratarse de uno de los sitios en los que residió durante su infancia Juan Domingo Perón, tres veces presidente de la Argentina.
Además del Museo de la Familia Perón, otros paseos imperdibles son la plazoleta Nueva León, que recuerda la fundación del sitio en 1535, y las estancias patagónicas para tareas rurales.
En febrero resulta de gran atractivo turístico la Fiesta Nacional del Salmón, en la que se desarrollan desde 1980 concursos de pesca, shows artísticos y el tradicional “Chupín del Pescador”
Finalmente, a unos 30 kilómetros de Camarones, el otro punto de interés destacado es la Reserva Provincial Cabo Dos Bahías, desde donde se avistan pingüinos de Magallanes, lobos marinos de dos pelos, zorros, ñandúes y guanacos.
Apartados costeros
Dentro de la misma Ruta Azul otro destino recomendado para las visitas extranjeras es la ciudad de Puerto Deseado, en la provincia de Santa Cruz, protagonista de una topografía de extravagantes características por albergar en su territorio el único río sudamericano cuyo cause abandonado fuera ocupado por el mar.
El área santacruceña fue visitada hace casi 200 años por el naturalista inglés Charles Darwin y es reconocida por albergar el Parque Interjurisdiccional Marino Isla Pingüino.
Camino hacia Puerto Santa Cruz, otros de los destinos imperdibles es la ciudad de Puerto San Julián, situada a orillas de una bahía que se adentra en la meseta patagónica. Una urbe reconocida por haber sido base de operaciones durante la Guerra de Malvinas.




