Bahamas se pone en alerta tras previsión de que mancha de petróleo derramado pueda tocar sus costas
Bahamas. El Departamento Meteorológico de esta nación caribeña alertó que una variación en los vientos podría provocar que el petróleo derramado en el Golfo de México llegue a las costas de ese archipiélago, aún cuando todo parecía indicar al cierre de esta edición que British Petroleum había logrado detener el flujo, con una compleja operación de sellado del pozo.
Según Michael Stubbs, el meteorólogo bahamés que hizo la previsión, los patrones climatológicos apuntan a un cambio del aire en dirección a las agujas del reloj que adentraría más crudo en la "Loop Current" (corriente cerrada) y, en consecuencia, lo empujaría a los litorales del país.
Una parte del derrame entró hace una semana en dicha corriente, la cual se desplaza en forma de una curva en el Golfo de México, y luego transita por el estrecho de Florida hacia el Atlántico, según explicaron en otros partes.
Stubbs indicó que el incremento de crudo en esa zona aceleraría la llegada de la marea negra al Banco Cayo Sal, Bimini y Gran Bahama, principales puntos de pesca de las islas.
Intentando proteger los recursos de la zona, el gobierno entró en contactos con agencias nacionales y globales para disponer de equipos y personal especializado ante una eventual catástrofe.
Las autoridades bahamesas anunciaron días atrás que las islas necesitarían ayuda internacional inmediata para enfrentar el posible fenómeno, cuyo impacto sería fatal para la ecología y economía del país, altamente dependiente del turismo y la pesca.
Logran parar el flujo desde el pozo
Mientras tanto, la Guardia Costera de EEUU anunció ayer que la petrolera BP logró detener el flujo de crudo desde el pozo que quedara expuesto con la explosión del pasado 20 de abril, aunque advirtió de que ahora hay que ver si la tubería "se estabiliza".
"Han logrado estabilizar el flujo y están bombeando barro dentro. Han detenido la salida de hidrocarburos", declaró el comandante de la Guardia Costera Thed Allen a la radio WWL First News, aunque aclaró además que era demasiado pronto para declarar el éxito de la operación, pero que se trataba “de la primera evaluación positiva del último intento de British Petroleum por frenar la salida del petróleo”, que está causando una catástrofe ecológica en las costas estadounidenses.




