IX edición de la Bienal de Oralidad en la ciudad heroica
Aunque del 24 al 28 próximos tendrá lugar en esta ciudad sur oriental de Cuba la IX edición de la Bienal de Oralidad, en modo alguno hay que esperar de un año a otro para disfrutar de las intervenciones de la Dra. Marta Cordiés Jackson, o de Fátima Patterson, o de quienes también hacen un arte genuino durante el acto de narrar o contar historias.
Como mismo embelesan las voces de Grisel Gómez o José Armando Garzón, o las guitarras de Almenares o Gabino, así también el público santiaguero puede extasiarse, escuchando las narraciones de la Cordiés, Fátima, María Antonia…
Para lo precedente, el único requisito es que haya un recinto para agruparse y escuchar, o cualquier reunión en la que el toque de distinción esté a cargo de narradores… o narradoras.
Santiago de Cuba se enorgullece con cada edición de la Bienal, y en la de este año, como aseguró la actriz María Antonia Fong, presidenta de la Asociación de Artistas Escénicos de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), nuevamente coincidirán cultores de esta manifestación de todo el país, y además tendrá un slogan: La palabra es el rescate de la memoria.
El lema me hizo recordar una conversación, precisamente con la Dra. Cordiés Jackson, en la que la directora del Centro Cultural Africano Fernando Ortiz, en esta ciudad, señalaba:
“Desde que se gestó la Bienal, se fundó con un evento teórico. Porque a nosotros nos parecía muy importante, que aparte de la narración oral como hecho escénico, hubiera una teoría de la oralidad, de la narración oral, que demostrara y que sustentara este hecho escénico.”
Ponderó Cordiés Jackson, que desde entonces, todas las Bienales en Santiago de Cuba hayan tenido un espacio teórico, donde los organizadores convocan a investigadores de diferentes disciplinas. Y al respecto añadió:
“Los convocamos no solo de disciplinas gramáticas, pues a este espacio nuestro han venido sicólogos; han venido lingüistas, literatos… de manera que se pueda ver, que la narración oral escénica, que es el hecho que sucede en el escenario, es sustentada también por un trabajo de investigación, de dedicación; por una teoría de la narración oral.”
La Directora del Centro Cultural Africano Fernando Ortiz señaló:
“Hemos tenido trabajos muy interesantes sobre el personaje, sobre el arte de narrar, sobre los cuentos, la selección de los cuentos, el trabajo del narrador. Pero también, sobre el análisis textual, sobre el papel que ocupa la palabra en el hecho cultural; la palabra como texto.”
Recordó la participación de un sicólogo en la Bienal:
“Nos habló de una preciosa experiencia que hicieron: tratar de usar los cuentos como terapia. Y todo esto que se mueve alrededor del evento teórico nos ha permitido ganar en experiencia y demostrar… sobre todo demostrar, que no es un hecho irreconciliable la teoría con la práctica, y que todas las disciplinas científicas pueden encontrar un lugar y un espacio y un acuerdo con las disciplinas artísticas.”
Durante el diálogo, la Dra. Cordiés mencionó nombres ilustres vinculados a la Bienal de Oralidad: José Héctor (Pomelapocha), Lucas Nápoles, Manuel Coca, la Dra. Mariana Carrillo… Y finalmente sintetizó la importancia de esta manifestación artística, y cuán abarcadora es, al decir:
“La oralidad es muy importante. La oralidad es el reservorio natural de la cultura de los hombres. Desde que el hombre conquista la palabra, la oralidad juega un papel importante: surge antes que la grafía, y es la manera que tiene el hombre de almacenar hechos, datos, historia. Estudiarla nos permite ahondar en la historia de la Humanidad. Y el espacio teórico de la Bienal, cuando la usa como material de estudio, nos permite profundizar en esas raíces.”
Así será otra vez, del 24 al 28 de noviembre en Santiago de Cuba, una ciudad pródiga en tradiciones, historias y anécdotas que merecen ser narradas. Por demás, un sitio donde sus habitantes se distinguen por ser locuaces, y pintorescos hasta en la manera de decir.