Argentina: Escasa ocupación en hoteles de Ushuaia y Bariloche debido a afectaciones por nube de ceniza volcánica

Argentina. La turística localidad de Ushuaia, la ciudad más austral del planeta, tiene una ocupación cero en sus hoteles debido a la cancelación de vuelos por la nube de ceniza volcánica que hace días afecta la zona, dijo a la prensa el fin de semana el presidente de la Cámara de Turismo local, Marcelo Lietti. En Bariloche, donde el aeropuerto seguirá cerrado hasta el 30 de junio, las reservas hoteleras han caído 80%, según fuentes empresariales.

“Los pasajeros que tenían reservas primero las corrieron unos días, después las cancelaron y, tras ello, pidieron la devolución del dinero”, dijo Lietti a la agencia DyN, y agregó que también han comenzado a “caerse algunas reservas de julio”. “No hay ni un turista en ningún hotel, ni en un hostal. La situación se ha vuelto alarmante”, refirió.

Aunque Aerolíneas Argentinas programó vuelos de emergencia para los próximos días para evacuar a los pasajeros varados en Ushuaia, los viajes son esporádicos esporádica y están condicionados por la situación de la nube de ceniza volcánica. La ciudad de Río Grande, en cambio, lleva ya 12 días sin el único vuelo diario que la comunica con el norte del país.

En otra ciudad turística clave para la temporada invernal, Bariloche, a 1.650 kilómetros al suroeste de Buenos Aires, empresarios calculan que las reservas hoteleras han caído 80%. La Defensa Civil decidió mantener cerrado el aeropuerto de la ciudad hasta el 30 de junio, debido a la diseminación de cenizas del complejo volcánico chileno situado en la cordillera de Los Andes.

Las Agrupación de Hosterías y Hoteles Bariloche estima que la localidad ha perdido unos dos millones de dólares desde el 4 de junio, cuando el Puyehue-Cordón Caulle entró en actividad y causó sucesivas suspensiones del tráfico aéreo en Argentina, Chile y otros países del Cono Sur, además de impulsar cancelaciones de reservas turísticas.

En un comunicado, esa asociación indicó que las pérdidas en Bariloche, sumadas a las de la vecina Villa La Angostura, en la Patagonia argentina, severamente afectada por el fenómeno, podrían llegar a casi 150 millones de dólares si la actividad volcánica se prolonga más allá de fin de mes, cuando arranca la temporada de turismo invernal.

En Bariloche, donde se espera este lunes realizar una jornada solidaria de limpieza como parte de la recuperación tras la lluvia de cenizas, empresas de buses de larga distancia evalúan “agregar frecuencias para agilizar la movilidad” de los visitantes pues aunque el aeropuerto permanece cerrado “el acceso terrestre se encuentra totalmente operativo”, informó la Cámara Argentina de Turismo (CAT).

Otro enclave para el turismo, La Angostura, a sólo 35 kilómetros del complejo volcánico chileno Puyehue-Cordón Caulle, fue declarada zona de desastre el jueves y desde entonces han emigrado unos 2.000 de sus 12.000 pobladores, informaron fuentes de la Defensa Civil. La villa turística sufre lluvias intermitentes de cenizas que obligaron a racionar el suministro de agua potable y de electricidad.

En situación similar están localidades rurales vecinas a Bariloche y la ciudad de San Martín de Los Andes, a unos 250 kilómetros de distancia, otro de los centros turísticos de la Patagonia argentina.