Carnival Corporation reiteró este fin de semana que espera que la terminal de cruceros que tiene previsto construir en la bahía de Maimón, en la costa Norte de República Dominicana, contribuya al relanzamiento de los destinos de esa zona, que podrían incluso llegar a competir con otros del Caribe donde la compañía también es propietaria y maneja puertos turísticos.
Disney Cruise Line anunció que, por primera vez, en la temporada 2012-2013 realizará travesías al Caribe desde el puerto de Miami, que días atrás recibió la noticia de que Regent Seven Seas Cruises también trasladará sus operaciones desde Port Everglades a PortMiami este año. La naviera, además, presentó su programa de cruceros para 2013 en América y Europa.
En los últimos años, la llegada de cruceros a Uruguay creció en forma exponencial; ha aumentado en un 128%, si se toma como base el quinquenio 2004-2005 y se compara respecto de la temporada 2010-2011 (la última cerrada), según datos del Ministerio de Turismo y Deporte. Dos son los puertos que reciben cruceros: el de la capital, Montevideo y el del destino más glamoroso de América, Punta del Este.
Un crucero es la forma más segura de viajar. Y, por supuesto, la más agradable. Así lo creen más de 16 millones de personas que en 2011 hicieron un crucero en algunos de los mares o ríos del mundo. Así lo explica el crecimiento de un 6,6% a nivel mundial de esta industria, la única que no parece haber sentido la crisis que afecta a todo el sector turístico.
El gobierno de México y la Asociación de Cruceros Caribeños de la Florida (Florida-Caribbean Cruise Association, FCCA) organizan un evento de dos días para mayo próximo en Quintana Roo, donde se reunirán representantes de los sectores público y privado y se llevarán a cabo workshops y una exposición de destinos.
Desde el otoño de 2013, MSC reposicionará sus barcos para cruceros en el Caribe desde Port Everglades, Fort Lauderdale, a Miami, luego de un acuerdo por un término inicial de tres años con este último puerto, que debe recibir a fines de enero la aprobación de las autoridades locales.
Mientras ascendía a 11 la cifra de muertos por el naufragio, el capitán del Costa Concordia, Francesco Schettino, era puesto en arresto domiciliario y se divulgaba su comprometedora comunicación con el jefe del Puerto de Livorno. Las autoridades ambientales italianas declararán el estado de emergencia para evitar un desastre ecológico, en previsión de un derrame del combustible del barco.
Enero será uno de los meses más activos de la actual temporada de cruceros en la capital argentina, donde se esperan unas 40 recaladas de barcos y el arribo de más de 94 mil cruceristas, que visitarán esa ciudad y en muchos casos pernoctarán en sus instalaciones hoteleras por al menos una noche.