¿Italia va camino a un nuevo cierre? Eso no debería pasar
Por Massimo Terracina
El nuevo DPCM (Decreto del Presidente del Consejo de Ministros) anti-Covid ha sido publicado. Bloquea los congresos y conferencias "en vivo" mientras que, casi simultáneamente, la maniobra económica de 2021 ha sido elaborada desde el actual gobierno.
De hecho, extiende hasta el próximo 30 de junio el uso del Bono de Vacaciones, un tema muy protestado en relación con alguna ayuda a las familias que ha sido fríamente acogido en el mercado.
Esta última medida, de hecho, ignora totalmente las exigencias presentadas por todas las asociaciones de viajeros (agencias de viajes y operadores turísticos) que reclaman la redistribución de los recursos utilizados para el "crédito fiscal de vacaciones" a la industria turística, para apoyarla, con esos 2.000 millones de euros.
El gobierno hace oídos sordos a las demandas de la industria del turismo.
El mundo de los eventos sufrió un "medio paso atrás": desde ahora hasta el 13 de noviembre, los congresos y conferencias sólo pueden tener lugar "virtualmente", mientras que, como primera discrepancia, las ferias nacionales e internacionales pueden celebrarse "en presencia". El nuevo decreto firmado por el Primer Ministro Giuseppe Conte, pretende frenar la actual oleada de infecciones que exprimen la libertad de organizar eventos y pone un interrogante a las convenciones y eventos a bordo de los cruceros, que en cualquier caso, debido a sus muy rígidos protocolos, podrían garantizar la correcta ejecución de los mismos, en pleno cumplimiento de las normas anti Covid.
Una gran sorpresa entonces, para los principales actores del mercado MICE, que podría realmente colapsar. El sector MICE genera casi 65 mil millones de euros al año con un impacto directo en el PIB de 36,2 mil millones al año, con casi 570 mil empleados
En palabras de Maria Carmela Colaiacovo, vicepresidenta de la Asociación Italiana de Hoteles de Confindustria, "estamos absolutamente asombrados, la parada total, independientemente del número de participantes y del cumplimiento de los protocolos, no parece justificada por el tipo de actividades. No estamos hablando de fiestas o de vida nocturna, sino de eventos organizados y controlados, a los que asisten exclusivamente personas adultas dedicadas a actividades comerciales. Nuestra opinión exige una segunda reflexión sobre esa decisión, en el contexto de estos meses de agotadora convivencia con el virus, una disciplina que podría permitirnos mantener vivas estas actividades, tan importantes para la economía del sector hotelero, pero también para el funcionamiento de los propios negocios".
En el decreto, hay nuevas malas noticias para los viajes y nuevos límites para los bares y restaurantes, junto con los gimnasios y piscinas bajo escrutinio hasta el final de la semana, antes de cualquier otra decisión.
Se ha puesto fin a los deportes de equipo de aficionados (aunque no a todos ellos), se han pospuesto las admisiones y los turnos de tarde para los estudiantes de secundaria y se contempla también la posibilidad de un verdadero toque de queda para los locales, dando a los alcaldes el poder de cerrar calles, plazas o distritos donde las reuniones podrían considerarse peligrosas.
La maniobra del presupuesto no está trayendo grandes, buenas o realmente útiles noticias, de hecho. Se ha llamado un período de "sangre y lágrimas" para la economía, ¡y no están engañando las expectativas!
Entre las medidas se han financiado algunas semanas más de Covid Cig (fondo de despido), con el mismo mecanismo que prevé dinero en efectivo gratis para aquellos que han registrado pérdidas más allá de un umbral establecido.
Se ha dispuesto la prórroga hasta el 31 de diciembre de 2020 de la suspensión de las actividades de notificación de nuevos avisos de pago, de las carpetas enviadas anteriormente y de los demás actos del Agente de Cobro. Pero el verdadero temor es cuándo el actual gobierno levantará el "bloque de despidos". Entonces comenzará el verdadero problema social.