El corazón montañoso de Puerto Rico revela sus pueblos más auténticos
La región Central de Puerto Rico guarda algunos de los rincones más cautivadores de la isla: pueblos tranquilos, paisajes imponentes y una riqueza cultural que invita a desconectar del bullicio urbano. Entre montañas, cafetales y vestigios indígenas, esta zona se ha convertido en un refugio ideal para quienes buscan naturaleza, historia y gastronomía auténtica.
Jayuya es uno de esos destinos imprescindibles. Este municipio serrano combina panorámicas majestuosas con una profunda conexión con el pasado taíno. Aquí se encuentra La Piedra Escrita, un tesoro arqueológico tallado con 52 petroglifos que datan del siglo VI. En esta misma región se alza el Cerro de Punta, el punto más alto de Puerto Rico, accesible tanto a pie como en vehículo, además de contar con la tirolina más elevada del territorio.
La gastronomía montañosa completa la experiencia. Cayey es parada obligatoria gracias a la célebre Ruta del lechón en Guavate, donde restaurantes familiares sirven lechón asado al espeto acompañado de clásicos boricuas como plátanos fritos o arroz con gandules. Un recorrido que resume la esencia culinaria del interior de la isla.
La zona central es también el corazón de la tradición cafetera puertorriqueña. Haciendas como Tres Ángeles, en Adjuntas, y Muñoz, en San Lorenzo, permiten conocer de cerca el cultivo del café, con recorridos guiados y productos de alta calidad que reflejan siglos de dedicación.
En Utuado, la historia indígena cobra vida en el Parque Ceremonial Indígena de Caguana, el yacimiento taíno más importante del Caribe. Sus monolitos, plazas ceremoniales y petroglifos revelan la cosmovisión de los primeros habitantes de la isla. Muy cerca, las cuevas, ríos y cascadas del Cañón Blanco ofrecen aventuras al aire libre como senderismo, exploración y saltos de agua.
Para quienes desean prolongar su estancia, Casa Grande Mountain Retreat ofrece alojamiento inmerso en plena naturaleza. Ubicado en un valle rodeado de vegetación tropical, este antiguo cafetal cuenta con 20 habitaciones distribuidas en la ladera, vistas panorámicas y senderos que conducen a cascadas y rincones frondosos del bosque.
La región Central demuestra que Puerto Rico no solo es playas y sol: es también montaña, cultura y tradición. Un destino para viajeros que desean explorar la isla desde sus raíces más profundas.




