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Ignacio Pascual de Riva, Consejero Delegado de Air Comet

02 de Febrero de 2009 5:37pm
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Ignacio Pascual de Riva, Consejero Delegado de Air Comet

A pesar de que el 2009 se avizora como un año difícil, en el que quizás abrir nuevas rutas pueda resultar complicado, Air Comet se propone consolidar lo que ha logrado en Latinoamérica, llegando a tener una frecuencia diaria hacia todos los destinos de esta región a los que vuela en la actualidad.

Ustedes están haciendo cambios dentro de la compañía, tanto en aviones como en la imagen de la empresa. ¿Pudiera explicarnos cómo va la marcha de este proceso?

-Estamos renovando la flota, desde el primero al último avión, y para finales de este año pensamos contar con una flota homogénea de aparatos Airbus A-330, con un máximo de antigüedad de solo un año, y una gama de productos a bordo, tanto en clase Comercial como en Turista, que consideramos será lo mejor que se puede ofrecer en España en estos momentos.

En clase Comercial tenemos asientos magníficos que se reclinan como ninguno, además de una atención exquisita; mientras que en la clase Turista hemos introducido una serie de ventajas ergonómicas en los asientos, y eso nos hace contar con un producto de primerísima categoría, que también es nuevo.

¿Cómo marchan los vuelos de la empresa al Cono Sur, a Chile, a Argentina? Tenemos entendido que tuvieron un problema en Chile. ¿Cómo resolvieron ese percance?

-En Chile hemos tenido un problema de demanda, en el caso de Air Comet Chile, que fue un proyecto que se inició en ese país como aerolínea para el Sur, como filial de Aerolíneas Argentinas; y obviamente, con nuestra salida de Argentina, que éramos parte del proyecto integrador para lo que hubiese sido una gran aerolínea en esa otra nación, pues eso dio al traste con el proyecto. Pero la decisión de la salida nuestra fue básicamente por malos resultados y por poca demanda.

Respecto a la pregunta de nuestros proyectos en el Cono Sur, lo que queremos es llegar a tener una frecuencia diaria hacia todos los destinos a los que volamos, y a partir de ahí consolidar y ofrecer el mejor producto que se pueda. Nosotros queremos volar a las capitales de los países más importantes, con una ruta diaria, y garantizar el mejor producto que haya en la oferta en estos momentos.

¿Cuántos aviones van a componer la flota de Air Comet?

-Eso va a depender un poco de la demanda, porque debemos contar con un mínimo de flexibilidad, pero queremos tener un mínimo de 12 y un máximo de 15 aviones.

¿Piensan realizar vuelos charter a determinados destinos?

-No lo descartamos. Aunque nuestro negocio va a ir siempre por la línea regular, hemos sido una compañía que ha hecho vuelos charter. Pero, si los hiciéramos en estos momentos, obviamente sería otro tipo de charter, atendiendo a que los aviones con que vamos a contar son de altísima categoría.

En los últimos años han mantenido vuelos a Jamaica con una frecuencia muy buena, dada la gran cantidad de hoteles españoles que han abierto allá. ¿Cómo se comportarán esas operaciones para el 2009 y 2010?

-Los vuelos a Jamaica fueron básicamente charter. Nosotros, como operador, no vendíamos Jamaica, pues esas operaciones las hacíamos fundamentalmente a través de Viajes Marsans. Llegamos incluso a tener hasta tres frecuencias semanales. Pero la respuesta que podemos darle es la misma que para los vuelos charter: no lo descartamos, y si algún operador nos lo pide y encaja en nuestra programación, entonces podremos hacerlo.

Hay destinos nuevos en Centroamérica que necesitan de conexiones aéreas, como las que tenía Air Madrid. ¿Piensan valorar esta posibilidad? El Ministro de Turismo de Nicaragua me adelantó que estaban en conversaciones con ustedes. ¿Es así?

-Estamos en conversaciones con todos, lo que sucede es que este es un año muy complicado que va a dar para pocas aventuras; y entonces, abrir una nueva ruta donde no opera nadie siempre es complicado y difícil, porque hay que crear la demanda y eso cuesta dinero y consume tiempo.

¿Y un destino como Panamá?

-Reitero que estamos en constante observación y nunca descartamos alguna posibilidad.

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