Extremadura Termal celebra su primer aniversario

24 de Julio de 2014 10:30pm
webmaster

De la mano de la Asociación de Balnearios de Extremadura, nació hace justo un año, Extremadura Termal, una marca que surgía para dar a conocer el potencial en turismo de salud y bienestar con el que cuenta ese territorio. Compuesta por seis centros termales, Alange, El Raposo, Salugral Termal Resort, Brozas, Fuentes del Trampal y Baños de Montemayor, ha logrado en doce meses su principal propósito: dar la imagen de ser un referente a nivel de balnearios.

Se han generado un sinfín de propuestas para todo tipo de viajeros que van más allá de los tratamientos wellness tradicionales, y que permiten mostrar la riqueza y los productos turísticos extremeños, entre los que destacan la gastronomía, el ocio, la naturaleza, la historia, la arquitectura, la cultura y el patrimonio.

Las seis estaciones termales, repartidas entre las provincias de Cáceres y Badajoz, se  encuentran en una zona de aguas mineromedicinales que utilizan para la realización de tratamientos -ricas en azufre, bicarbonato o hierro, entre otros - , por lo que se han convertido en lugares de peregrinaje para muchas personas.

Y es que las terapias naturales ganan adeptos, ahora que cuidarse se concibe no solo como un remedio o una manera de prevención, sino como una forma de descansar y hacer turismo. La marca, que cumple ahora su primer año de vida,  lo hace con la mejor noticia que podría esperar: un nivel de ocupación constante superior al 90%.

Aunque diferentes, casi todos los centros que componen Extremadura Termal tienen en común tres cosas: cuentan con aguas declaradas de utilidad pública en los albores de 1900; se trata de establecimientos cuya gestión ha pasado de generación en generación desde principios del siglo pasado, lo que les confiere un aire familiar; y cuentan con un elevado valor patrimonial, ya que unos fueron construidos sobre vestigios de época romana y otros sobre cimientos históricos que, cientos de años atrás, ya aprovechaban las propiedades de sus manantiales para beneficio de la gente del lugar.

Pero, por separado, cada centro tiene alguna singularidad que lo hace único, lo que permitirá al viajero decantarse por uno u otro en función de sus gustos y necesidades.

El responsable de Comunicación de Extremadura Termal, Álvaro Cortés, precisó
que además, tres de los seis centros cuentan ya con la certificación de la Q de calidad, algo que contribuye enormemente a incrementar la eficiencia de la oferta hotelera extremeña.

En definitiva, en esos seis centros la moderna tecnología se une a la tradición y la historia de sus antepasados, quienes ya supieron aprovechar las propiedades beneficiosas del agua mineromedicinal que brota de los manantiales extremeños.

 Ahora es el turno para todo tipo de viajeros, sobre todo aquellos que se desplazan en familia, quienes lo hacen en pareja o con amigos, y los que lo hacen por motivos de salud,  para disfrutar de sus instalaciones y tratamientos, lo mismo  en búsqueda del bienestar o del ocio que proporcionan: desde una cuidada gastronomía, hasta experiencias únicas al aire libre, pasando por el acercamiento al patrimonio histórico y la cultura que encierra un territorio tan rico como el extremeño.

Una marca que ha logrado en solo un año de vida aunar en un mismo producto bienestar, salud, ocio, gastronomía, naturaleza, familia, historia, arquitectura, cultura, miles de leyendas y un hermoso territorio por descubrir y disfrutar.


 

Back to top