Brasil ratifica que supuesta epidemia de fiebre amarilla sólo existió en los medios de comunicación

Fuente: Periódico Turístico Mensajero

Brasil. Como todos los años, con la llegada del verano, miles de argentinos se disponen a viajar hacia las costas de este país en busca de ese objeto de deseo que constituyen sus cálidas aguas y arenas blancas, sus carnavales, paisajes y ese toque distintivo de alegría que penetra hasta el Amazonas. Sin embargo, al elegir al país vecino como destino, el turista corre el riesgo de encontrarse con sorpresas como la ocurrida hace unas semanas, cuando se comenzó a divulgar un posible rebrote de fiebre amarilla, a raíz de la muerte de un español en el Estado de Goiás, entre otros casos, que le dieron al suceso gran divulgación internacional.

En el momento en que se conoció la noticia, una innumerable cantidad de brasileros y turistas comenzaron a indagar sobre el problema. Las autoridades sanitarias de Brasil debieron constituir entonces un gabinete de Emergencia para determinar las estrategias a seguir y unificar la información.

La fiebre amarilla urbana, según explicaron las fuentes oficiales, es una enfermedad erradicada desde 1942. Si bien el país atraviesa una endemia, lo cierto es que se localiza en zonas muy puntuales: Acre, Amazonas, Amapá, Rondônia, Roraima, Pará, Tocantins, Goiás, Mato Grosso, Mato Grosso do Sul y Brasília, estados de Maranhão y Minas Gerais, y los municipios localizados al sur del Estado de Piauí, al oeste y sur de Bahia, al norte de Espírito Santo, al noroeste de São Paulo y al oeste de los estados de Paraná, Santa Catarina y Rio Grande do Sul.

José Gomes Temporão, el ministro de Salud de Brasil, sostuvo en distintas conferencias que "esta historia es una mentira. Estoy aquí para garantizar que no hay ninguna chance de fiebre amarilla urbana en todo el país", y agregó que la situación estaba controlada. No obstante, se debió enviar una partida con dos millones de dosis contra la fiebre amarilla, y se recomendó a los extranjeros que visiten alguna de las zonas de riesgos, vacunarse con diez días de anticipación.

La semana pasada, en Argentina, la Asociación de Agentes de Viajes organizó una presentación en la que Ricardo Román, director para América latina y Caribe de ABAV, agregó que "toda la vida ha habido fiebre amarilla silvestre en Brasil, pero ahora las comunicaciones son más rápidas, entonces, cuando no hay noticias, cualquier pequeña noticia es buena". De hecho, es importante recordar que en el período que va de 1996 al 2007 se sucedieron aproximadamente 349 casos, que responden a las características particulares del país en las zonas de riesgo.

En este marco, es natural pensar, como explicó Juan Carlos Chervatín, presidente de AAOVYT y titular de Consult House de Argentina, que "detrás de esto hay fines comerciales que conllevaron para un montón de gente la lógica preocupación. Las entidades debemos ser mucho más cuidadosas cuando emitimos este tipo de comunicados, por los lamentables problemas que generan en la población".

La ficción como realidad

Cuando la desinformación se hace eco en los medios de comunicación y el amarillismo gana las calles, el caos es inminente y se propaga en todas las direcciones posibles. De esta manera, la situación de Brasil significó la declaración de estado de alerta en países fronterizos, como Paraguay y Uruguay; mientras que en la Argentina, la Embajada del país vecino estableció un equipo para canalizar todas las consultas, las autoridades nacionales vinculadas al Ministerio de Salud especificaron cuáles son los centros de vacunación habilitados y los operadores de turismo llevaron adelante distintas políticas de comunicación para tranquilizar a sus clientes.

Como explicó Marcelo Viera, gerente Comercial de Export, "cuando uno desconoce algo, generalmente actúa equivocado, por eso creo que lo mejor era mantener la calma e informarse. Indudablemente la fiebre amarilla en Brasil existe, negarla es de necios, lo mismo que el Chagas en Argentina; pero ahí está el punto, es decir, en ubicar dónde se producen los hechos y en poder analizar la situación".

En este sentido, cabe destacar que la visión de los operadores consultados que trabajan el destino en Argentina, se puede sintetizar a través de la frase que esbozó Juan Maiztegui, gerente de Producto de Principios Tour Operator, al plantear que "el panorama general debe ser la cuarta parte de lo que se dice. Todos los años ocurre algo con Brasil y eso es sugestivo porque, en definitiva, cada uno defiende su mercado".

Aclaraciones importantes

"Brasil es el mayor fabricante de vacunas contra la fiebre amarilla del mundo, de hecho, en el 2007 se exportaron 15 mil millones de vacunas a distintos países. Sin embargo, como consecuencia de la fobia que desató la noticia de fiebre amarilla, este año se está exportando una menor cantidad de dosis, debido a que los brasileros también quieren aplicarse las vacunas", explicó Ricardo Román. Asimismo, agregó que prácticamente el hecho no afectó al turismo y que las aclaraciones que realizan tienen el objetivo de evitar que influya negativamente.