José Miguel Gaitán, Subdirector General del Instituto Guatemalteco de Turismo

Por: José Carlos de Santiago

Guatemala ha decidido tomarse muy en serio su desarrollo como destino turístico, porque sabe que sus riquezas mayores, naturaleza y cultura, resultan muy atractivas para el mercado europeo, que creció el año pasado un 38 % en sus emisiones hacia esta nación centroamericana.

En muy poco tiempo, Guatemala ha desarrollado un fuerte programa de inversión en infraestructuras que incluye la remodelación y ampliación de carreteras, de cinco aeropuertos internacionales y la construcción de dos puertos de cruceros. De conjunto con el Banco Interamericano de Desarrollo, el país inició además un proyecto a largo plazo que forma y prepara a muchas de sus tribus indígenas para integrarlas al impulso turístico.

¿Qué nuevas medidas está tomando el gobierno de Guatemala para asegurar aun más la cordialidad y facilidad de transportación con plena seguridad de los turistas dentro del país?

-Desde que asumió el gobierno del Presidente Oscar Berger, la política que se trazó fue la de mejorar la seguridad y la asistencia al turista. Tenemos un programa de coordinación con los operadores de turismo mediante el cual mantenemos un monitoreo de rutas que se realizan en Guatemala, y contamos en cada punto de interés con una red de ocho personas que manejan todo el tema de la asistencia al turista.

Esto ha permitido que hoy en día Guatemala sea un país muy seguro, una categoría que ha sido reconocida no solo por los cónsules, la Asociación de Cónsules de los Países Amigos que existe en Guatemala, sino que tenemos la gran ventaja de que se trata ahora de un programa permanente y que se mantiene para todo el turismo, no solo de grupos, sino también individual.

¿En ese grupo de cónsules está incluido también el cónsul norteamericano?

-Sí, el norteamericano y el alemán.

Ustedes tenían también un programa de inversión en infraestructura. ¿Cómo están las carreteras que se encontraban en construcción?

-Siguen en construcción muchas de ellas, y la mayoría estarán concluidas en el 2008. Se están haciendo dos carriles hasta la ciudad de Quetzaltenango, que es la segunda ciudad en importancia del país; se está ampliando a cuatro carriles la carretera de la costa sur hasta Cocales; se amplía también la carretera que va hacia El Salvador, de manera que en tema de infraestructura el país ha cambiado en estos tres años.

Hay muchos proyectos ya empezados, como un periférico metropolitano de la Ciudad de Guatemala, la transversal del norte, proyectos no solo en carreteras, sino también en aeropuertos, cinco aeropuertos internacionales. Se van a hacer también dos puertos para cruceros, uno de ellos en la costa del Pacífico, en la zona de Retauleo, y el otro en la costa Atlántica, con la compañía Carnival, que estará listo dentro de dos años.

Respecto a las rutas arqueológicas que se estaban realizando desde México hacia el sur, ¿cómo van a coordinar ustedes y a mejorar aun más esa circulación de turistas? ¿Cómo van a mejorar las aduanas e incluso el transporte?

-En temas de aduanas, Guatemala ha sido el país que ha promulgado la idea de eliminarlas. De hecho, ya pasamos al El Salvador cualquier tipo de turismo y no median las aduanas, es como pasar de un país europeo a otro. Esto funciona así por lo menos en las fronteras entre Honduras, El Salvador y Nicaragua. El tema que quizás sea un poco más difícil en este sentido será México, porque hay circunstancias que aun no permiten un cruce, una facilitación turística en la frontera mexicana, pero al menos en las fronteras de los países centroamericanos, ese tipo de facilitación es un elemento primordial en estos momentos.

Hay un tema de formación que es muy importante para la incorporación de las tribus indígenas, que de hecho son muchas en Guatemala, que hablan muchas lenguas y que hasta ahora no tenían la fuerza que el actual gobierno quiere concederles. ¿Cómo se está integrando a estas tribus al turismo, a estas personas que no hablan español, sino solo sus lenguas natales?

-Existe un programa apoyado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que se enfoca en la participación de las tribus indígenas para formar en ellas empresarios de turismo. Se trata de un programa de más de 10 años, ya que se consideró oportuno enfocar este asunto a largo plazo.

A través de este programa se están generando las rutas, se está estudiando y trabajando con las comunidades indígenas, precisamente para ver las oportunidades de desarrollo de pequeñas empresas, comenzando con el hospedaje, con el mejoramiento de las áreas de servicios, y con temas de restauración y demás, que hacen que estas comunidades vean la proyección futura del turismo como una gran oportunidad.

No todas las comunidades van a ser integradas al plan, porque no todas ellas tienen el atractivo o las capacidades. Entonces el estudio que se está haciendo durante estos tres años es identificar a aquellas comunidades indígenas que puedan tener un gran potencial para el desarrollo en temas turísticos.

¿Se están creando las escuelas de formación?

-Sí. Hay un proyecto, en el cual el BID nos va a apoyar, que tiene una demostración con una comunidad en Río Dulce, en la región de Itzabal, y en donde se han generado los peritos en turismo y en agroforestería. Este tipo de modelo no solo va orientado a la formación turística, sino también al mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad. La formación de ese grupo concluye con un trabajo de campo en el que tienen que presentar un proyecto que consiga el mejoramiento de la comunidad.

Muchos de los proyectos han sido demostrativos, y se han franquiciado para que no se quede únicamente en la zona de Itzabal, sino que pase también a Petén, en el área de las Verapases, en la de Zacatepeque en Antigua, con el objetivo de hacer varias escuelas orientadas a la formación del indígena, o de los campesinos pobres, para darles las habilidades y los conocimientos.

Esto es un modelo que ha sido tomado de uno similar aplicado en Colombia, y mediante el se le ha dado formación a comunidades pobres, campesinas o indígenas para orientarlas a temas específicamente productivos. Es, como ya dije, un efecto demostrativo y se ha hecho un proyecto que ya lleva doce años y se va a replicar en cinco lugares en Guatemala.

Hay una gran noticia que se dio a conocer durante la ITB de Berlín, que es el crecimiento de los vuelos directos desde España, como centro de distribución en Europa hacia Guatemala, a través de Iberia. ¿Qué capital va a invertir Guatemala en campañas de promoción en países como España, Alemania, Austria y Suiza?

-En estos momentos tenemos un convenio conjunto con Iberia, en el cual Guatemala está aportando 3 millones de dólares, a razón de 1 millón anual, desde hace ya dos años. Este es el tercer año del convenio y una vez que concluya tendremos que renegociar la promoción conjunta. En ese sentido Guatemala está invirtiendo fuertemente, aportando capital conjuntamente con Iberia para acrecentar el mercado. La gran noticia del Presidente de Iberia fue que el mercado de Europa hacia Guatemala el año pasado tuvo un crecimiento del 38%.

Sin embargo, el mercado alemán, suizo y austriaco sí tiene gran fuerza en Guatemala.

-Así es, para estos mercados a los que les llaman la atención los lugares exóticos y culturales como los nuestros, somos un destino atractivo

¿Podemos decirle a los alemanes, austriacos y suizos que pueden viajar y sentirse en el país perfectamente seguros?

-Por supuesto. Ciento por ciento.