Guatemala promoverá en 2012 ciudad maya en el fondo del lago Atitlán
La ciudad de Samabaj, descubierta en la década de 1990 en el fondo del lago Atitlán, será promovida por el Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) como parte de una nueva ruta que celebrará en 2012 el fin de ciclo en el calendario maya.
La presentación oficial del destino turístico Samabaj se realizará durante el Festival Cultural de Atitlán, el 4 de diciembre próximo, cuando también se podrán apreciar objetos extraídos del fondo de lago y se anunciará la ampliación del Museo Lacustre, fundado en 1998, que alberga piezas de alfarería rescatadas en el sitio, informó el diario Prensa Libre.
También habrá una sala virtual con efectos de imágenes, donde el visitante podrá experimentar que está bajo el agua y recorre la ciudad sumergida.
Walter Fisher, asesor del Inguat, explicó que ya comenzó la construcción de la ampliación del museo, que debe estar listo en el primer semestre de 2012. Una de las razones para construir el museo es la dificultad que tiene para los turistas sumergirse hasta 35 metros de profundidad en el lago de Atitlán con el objetivo de ver los vestigios.
Fisher destacó ante la prensa que es una oportunidad para atraer turistas hacia los pueblos que rodean el lago y promover su conservación por medio de la no contaminación del manto acuífero, declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.
“La idea es sumar a Samabaj al paquete turístico que el Inguat prepara, el cual iniciará en puerto de Iztapa y finalizará en el Reino Khan, Mirador, Petén. Será una sola vez que el país esté en los ojos del mundo, la oportunidad no puede desaprovecharse”, dijo.
Roberto Samayoa, quien exploró el lago en los años ´90 y descubrió el sitio arqueológico, explicó que se planea realizar visitas turísticas guiadas para buzos expertos con licencia en mar abierto, ya que la ciudad se encuentra a unos 35 metros de profundidad y a 600 metros de la orilla, desplegada en un área de 300 por 400 metros.
Samabaj
Según Samayoa, que citó estudios arqueológicos de expertos, las vasijas y la estela lisa encontradas en la ciudad datan del período Preclásico maya (2500 a. C. al 200 d. C).
Samayoa nombró a la ciudad Samabaj uniendo las primeras sílabas de su apellido y la palabra ‘abaj’, “que significa piedra en varios idiomas mayas”.
Recordó que comenzó a buscar la ciudad sumergida desde joven, impulsado por las historias locales, y fue en 1998, con el apoyo del Instituto de Antropología e Historia, cuando notificó el descubrimiento. Desde entonces continuó la búsqueda y participó en varias expediciones de investigación.
En la ciudad se han hallado varios grupos de edificios habitacionales y ceremoniales, restos de una pirámide de dos cuerpos, cinco muelles de piedra y edificaciones circulares que podrían ser temascales o baños de vapor.
Entre las teorías sobre la desaparición de Samabaj, Samayoa destacó dos: según la primera, surgió un volcán dentro del lago, que tapó los drenajes naturales y provocó una elevación muy rápida de las aguas.
La segunda apunta a un fenómeno climático muy fuerte, con mucha lluvia, que igualmente provocó un alza repentina del nivel de las aguas. “La ciudad quedó sumergida en forma violenta, porque si hubiera sido un proceso lento no se hubieran encontrado vasijas, ya que la presión del agua y las corrientes del lago las hubieran aplastado”, indicó.




