Demandan en congreso de turismo rural de Navarra una mayor innovación en ese segmento

El IV Congreso Internacional de Turismo Rural, celebrado en la localidad española de Pamplona, concluyó que aunar la tradición y la innovación, el territorio y la tecnología con  ayuda de la Administración Pública debe ser el camino para crear destinos inteligentes “smart destinations” de turismo rural que sean capaces de trabajar entre sí y de alcanzar nuevos mercados.

Un total de más de 250 profesionales del mundo del turismo rural y del sector de las tecnologías de la comunicación y de la información (Tic’s) asistieron a este evento, coincidiendo en sus debates en que para el turismo rural en España es tiempo de innovar, de fortalecimiento asociativo, de consolidar las redes empresariales, de tratar de alcanzar mercados más lejanos y más segmentados, así como de avanzar en la especialización y profesionalización de la oferta.

A lo largo de las dos jornadas del Congreso se habló del papel de las nuevas tecnologías aplicadas al turismo rural, y de su función de ayudar a transmitir la inmediatez, la vitalidad y las experiencias irrepetibles de los clientes.

“En este contexto, la tecnología se convierte en un aliado para mejorar la calidad, la competitividad y la viabilidad de los negocios de turismo rural, lo que lleva de nuevo a la sostenibilidad de los territorios: sólo si se realiza una buena promoción, podrán seguir vivos y habitados”, refiere una nota de los organizadores que sirve de cierre a muchos de los temas tratados en la cita.

De esta manera, y según enfatizan, el territorio se convierte en una experiencia global y compartida, y cada una de las experiencias puede ser transmitida al último rincón del mundo captando a su vez nuevos viajeros; por medio de herramientas deseablemente cada vez más sencillas, más intuitivas, más flexibles y más económicas.

Necesidad de coordinación sector público y privado

Para lograr una integración entre tradición e innovación, los asistentes al Congreso coincidieron también en que se necesita un mayor esfuerzo de coordinación con las Administraciones Públicas competentes en turismo rural, que tienen un papel regulador y dinamizador esencial que deberá contribuir a aumentar la competitividad y la calidad de la oferta.

El papel de coordinación y dinamización del sector público debe incluir la facilitación del contacto y el acceso a orientación directa sobre las estrategias y los fondos europeos que afectan al turismo rural y que pueden contribuir a resolver sus principales problemas; destacando entre ellos el de la estacionalidad y el del acceso a los mercados europeos, mercados lejanos y mercados segmentados.

Las certificaciones se deben entender en todo este contexto como un elemento más de garantía de calidad, de gestión de la sostenibilidad y de orientación al mercado. Este mismo papel es compartido con las marcas de productos, como en el ejemplo práctico que pudo verse en el IV Congreso sobre las Farm Holidays en Austria y de cómo una gestión eficaz del branding y de la identidad corporativa puede conducir directamente al éxito de una red empresarial de turismo rural.

Por consiguiente, en el Congreso se concluyó que lo que se hace necesario con inmediatez es facilitar la gestión y el acceso a todo este conocimiento, y de nuevo es necesario solicitar el papel gestor y coordinador de las Administraciones; que deben facilitar el acceso universal al conocimiento actual y futuro, coordinarse entre ellas y crear el marco más cómodo y flexible posible para que los empresarios y emprendedores hagan su trabajo.