¿Por qué sí contratar a un Wedding Planner?

Por Lic. Lídice Vázquez, Wedding Planner Specialist

El concepto de Wedding Planner como tal es relativamente reciente, inició originalmente en las esferas de la alta sociedad neoyorkina a finales del siglo XIX, a raíz de la competencia entre las señoritas de alta alcurnia de quien tenía la mejor boda y quien se casaba con el mejor partido. Haciendo gala de las fortunas de la unión de las familias que representaban los contrayentes. A diferencia de Oriente, que hasta hoy día, desde tiempos inmemorables se estila el recurrir a “casamenteras” para concretar un matrimonio optimo, pero eso es adentrarnos en usos y costumbres culturales y religiosos más específicos como Bodas Hidues, Bodas judías, Musulmanas, etc. que en este mundo globalizado son de igual importantes y demandadas.

Antiguamente la celebración de un matrimonio era pactada por los patriarcas de los contrayentes y la planeación estaba a manos de las mujeres de ambas familias. Los tiempos han cambiado, así como las necesidades de los involucrados, porque ya no es solo organizar una boda, si no Materializar sueños! Por eso algunos autores nos llaman “Las Hadas Madrinas del Siglo XXI”.

Un Wedding Planner es un profesional multidisciplinario con conocimientos en floristería, colorimetría, administración (pasando desde presupuestos, tiempos y un gran etc.), imagen, protocolos, ceremoniales, manejo de agendas, coordinación y contratación de la proveeduría, etc. y sobretodo con la habilidad de resolver cualquier situación o petición eventual que se presente, antes y durante la celebración de la Boda.

Hoy en día, cualquier prestador de servicios para eventos, no vende UN EVENTO, vende !la experiencia! (para los contrayentes y para los asistentes). Y eso nos obliga a estar capacitados y actualizados a las necesidades de nuestro mercado meta, de lo contrario estamos fuera. Todos y cada uno de los prestadores de servicios involucrados somos parte de un engranaje de una Gran Maquinaria, cada quien cumpliendo su función, sin margen de error, ya que no podemos “repetir” o “reparar” porque solo tenemos ese momento, no hay manera de repetir una ceremonia o la boda.

Actualmente, un evento de cualquier índole, hay una gran producción y logística detrás (hablando de bodas), desde que el novio entrega el anillo y todas las celebraciones previas: Entrega de anillo, pedida de mano, despedida de soltera y soltero, el rompe hielo, la preboda, el ensayo, la boda, todas las ceremonias que se hayan elegido (religiosas, chamánicas, simbólicas, etc.), el trasnochador, la tornaboda, la luna de miel, el open house y lo que resulte o se les ocurra. Y que todo es válido y celebrable.

La derrama económica que representa 1 boda en la generación de empleos tanto directa como indirectamente en cada destino (ciudad donde se celebre la boda) es importante y marca la diferencia, porque son muchos los servicios involucrados: peluqueros, reposteros, taxistas, hoteles, restaurantes, agencias de viajes, imprentas, diseñadores, fotógrafos, músicos, floristas, vinaterías y demás servicios que se le sumen. Para tal faena, solo alguien con los conocimientos y expertis con dirección al mismo objetivo: LA BODA QUE SOÑARON, solo un Wedding Planner Profesional es la opción, es demasiado lo que está en juego y sobretodo porque es un servicio intangible, hasta que no sea el GRAN DIA, tanto como proveedor o como contrayente, no sabes ¿qué sigue?

Una Boda con Wedding Planner, se nota y si no tiene, se nota más. Una Boda, de la mano de un profesional siempre será un evento limpio, ordenado, sin mermas y sin fugas de presupuesto.

Invertir en el rubro: Wedding Planner. No es un gasto, o perder el control de la Boda, es invertir en la tranquilidad de los contrayentes y sus familias, es disfrutar SU Boda desde el día 1 de la planeación y elección de proveedores, sin estrés, sin complicaciones, sin sorpresas y ser solo protagonistas del GRAN DÍA.

No solo hay invertido dinero de por medio, son las emociones, los sueños y las ilusiones de dos familias ser testigos de su unión ¿a quién contratar? Al Wedding Planner mejor capacitado, no solo empíricamente, académicamente es necesario. Los contrayentes y los compañeros proveedores siempre se inclinaran con trabajar con un Wedding Planner certificado y capacitado. Garantiza éxito.