Buceo en Panamá para sumergirte en el país
Por Celia Madroñal
Panamá es el nexo de unión entre dos océanos, el Atlántico y el Pacífico. Sin embargo, viajar sobre ellos en barco no es la única opción para vivir una experiencia marítima. Con su amplia biodiversidad, el país ofrece un paisaje perfecto para salir a practicar buceo.
Lo que esconden las playas de arena blanca y el azul turquesa son tortugas o arrecifes de coral. En algunos lugares, como el Parque Nacional, incluso se podrán avistar reliquias que en algún tiempo lejano pertenecieron a piratas. Por otra parte, el calendario marca a agosto y septiembre como los mejores meses del año para conocer a grandes habitantes del océano como son las orcas, los tiburones de arrecife o las ballenas jorobadas.
Uno de los lugares más recomendados para los viajeros son las Islas de la Boca del Toro. Es allí donde se encuentra el Parque Nacional Marino de las Islas Bastimentos, nombrado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y cuyo objetivo consiste en la preservación de la vida acuática y la naturaleza de las costas. Otras opciones que ofrece es la visita a la cueva de los murciélagos o apreciar en la noche la bioluminiscencia, proceso por el que organismos vivos producen luz y que se aprecia en las orillas.
A pesar de ser el destino más reconocido, Bocas del Toro no es el único lugar donde poder disfrutar del buceo. En la Isla Caña se pueden apreciar tortugas y más de 500 especies de peces. El Archipiélago de las Perlas lo constituyen alrededor de 200 islas, la mayoría deshabitadas, que regala el nado de las mantarrayas, y cuyas corrientes benefician la inmersión.
Otro destino que despierta la curiosidad es el Lago Gatún, que funciona como reserva que ayuda al Canal de Panamá en temporadas de sequía. Cuando se creó hace más de 100 años, era considerado el lago artificial más grande del mundo. La visibilidad no es tan buena como en el océano, pero aún así merece la pena explorarlo.
Y si eso se queda corto, aún hay más, como la Isla Solarte o el Parque Nacional de Coiba. Sin duda, Panamá tiene bajo el agua muchos secretos que no merecen estar ocultos.
