Cruceros: vida a la “economía azul”

14 de Junio de 2018 3:17pm
coordinador
Cruceros: vida a la “economía azul”

Desde hace algunos años, la cifra anual de pasajeros que se embarcan en cruceros en todo el mundo sostiene un importante crecimiento.

Según la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), la principal autoridad y voz de la comunidad global de cruceros, en 2017 la industria alcanzó los 26,7 millones de cruceristas, desde una previsión de 25,8 millones para ese año.

Para este 2018 se prevé alcanzar los 28 millones de pasajeros, si se tiene en cuenta el calendario de lanzamiento de los nuevos buques y el despliegue regional previsto, ha reiterado la Asociación.

El Caribe, una vez más, figuró como el destino más elegido (35 %), mientras que Estados Unidos fue el principal mercado emisor, seguido por China.

El mar Mediterráneo, con algo menos del 16% de la oferta en todo el mundo, fue el segundo destino más importante y Europa, sin contar la región mediterránea, ocupó la tercera posición de la lista con un 11%, según datos difundidos.

Los números no solo señalan el crecimiento de una industria eficiente, sino que llaman hacia la reflexión y el compromiso de estas grandes naves con las aguas que pisan.

“Si queremos beneficiarnos plenamente de los océanos, debemos invertir la tendencia a la degradación del medio marino causada por la contaminación, la explotación excesiva y la acidificación” advirtió en 2013 el entonces secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Este 5 junio, Día Mundial del Medio Ambiente, dedicado a la lucha contra la contaminación por plásticos, fue una constante la pregunta de cómo reducir el impacto medioambiental que provocan esos lujosos colosos del turismo.

“Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible”, es la máxima que encierra el objetivo número 14 de la Agenda para el Desarrollo Sostenible.

Desde la Organización Mundial de Turismo (OMT) se reconoce el rol que desempeña el turismo en aquellos lugares donde la actividad marítima es la base de la economía.

CLIA, entidad que engloba a las 58 principales compañías navieras del mundo, asegura que todos sus asociados se han acogido a un código de vertidos cero de aguas y residuos no tratados y sostiene que es mucho más exigente incluso que la legislación internacional que sí los permite en determinadas circunstancias.

Otras acciones para contrarrestar el impacto ambiental están asociadas al uso del gas licuado como combustible limpio para los barcos.

La Unión Europea y luego la OMT han decidido tomar cartas en el asunto, y se prevé que a partir de 2020 todos los barcos utilicen un combustible con un contenido de azufre del 0,5% (LSFO), según reportó Metrópoli Abierta.

El gas natural licuado (GNL), es el combustible más eficiente y limpio que existe porque reduce a cero las emisiones de óxidos de azufre y casi elimina las partículas en suspensión, mientras que las de óxidos de nitrógeno caen un 85%.

La OMT estima que un tercio de los turistas elige el destino en base a su sostenibilidad, al menos el 39% de los turistas le gustaría probar un “ecotour”, tours respetuosos con el medio ambiente y el 79 % considera de importancia reservar un hotel que aplique prácticas ecológicas y sostenibles.

Por ello, si reconocemos en los mares y océanos el principal aliado para la prosperidad de este negocio turístico, los cruceros deben aparecer como una oportunidad de crecimiento y no un impedimento para nuestro desarrollo sostenible.

Back to top