Santa Lucía se corona como destino privilegiado en el Caribe
El ingreso de Santa Lucía en el selecto club de los países caribeños que recibió el año pasado más de un millón de visitantes estimula la creciente llegada en 2018 de turistas, tanto en cruceros como por vía aérea, para estancias en tierra más prolongadas y rentables.
La seductora isla del Caribe Oriental, disputada por Francia e Inglaterra a lo largo de tres siglos, en los que fue siete veces francesa y otras tantas inglesa, registró en 2017 un crecimiento anual en el número de visitantes de 11 por ciento, el más alto entre los 31 países miembros de la Organización de Turismo del Caribe (CTO).
Por su privilegiada posición geográfica, el pequeño estado insular, situado en el Caribe Oriental, al norte de San Vicente y las Granadinas y al sur de la isla de la Martinica, escapó a los devastadores efectos de los huracanes Irma y María, que tanto daño hicieron el año pasado un poco más al norte.
Una activa promoción en las más recientes ferias internacionales de la industria de viajes, como la WTM de Londres, FITUR de España, la ITB de Alemania o las menos resonantes bolsas turísticas caribeñas, como el Salon du Voyage, de Martinica, impulsan el éxito que registra actualmente.
Nuevas inversiones en la planta hotelera, con instalaciones super lujosas, que insertan la más alta tecnología y un servicio profesional especializado en un ambiente natural único, de una belleza fuera de serie, garantizan su espectacular crecimiento.
A esta extraordinaria combinación de sol, playa y montaña, en un área geográfica de 616 kilómetros cuadrados, se suma una gastronomía donde se reúnen sabores y olores locales con lo más exquisito del mundo, en un ambiente social marcado por la cordialidad de sus casi 185 000 habitantes.
Las llegadas récord de Santa Lucía en 2017 fueron impulsadas por un significativo aumento en el tráfico de cruceros, a pesar del cierre durante ocho meses de un puesto en la terminal de Pointe Seraphine.
La isla acogió a 669 217 cruceristas, lo que representó un aumento del 14 por ciento respecto a los 587 749 pasajeros recibidos en 2016.
Las llegadas para estancias más prologadas en tierra también registraron un alza significativa de 9,9 por ciento, al pasar de 347 872 en 2016 a 386 127 en 2017.
"Estamos contentos con los niveles de crecimiento observados y a medida que continuamos nuestros esfuerzos de comercialización, también buscamos maximizar el impacto del turismo en nuestra economía", dijo Dominic Fedee, ministro de Información y Turismo de Santa Lucía, en una reciente presentación de los datos.
Especialistas de la industria de viajes califican de “destino boutique” a esta isla de soberbias instalaciones, en la que hoteles de 3 estrellas tienen un precio medio de 184 dólares/día en tanto los de 5 estrellas promedian 798, lo que por supuesto indica que hay ofertas que sobrepasan con mucho esa cifra.
Tal como anunció Fedee el año pasado, entre los emprendimientos hoteleros más recientes, dirigidos a satisfacer una demanda del más alto nivel, abrió sus puertas a principios de 2018, en el distrito de Rodney Bay, el complejo de lujo Harbour Club, de 155 habitaciones, que será operado y administrado por una filial de Aimbridge Hospitality LLC.
Harbor Club cuenta con habitaciones contemporáneas de estilo cabaña, inspiradas en lujosas cabinas de crucero y suites con diseños náuticos.
Las habitaciones a medida tienen sus propias piscinas privadas, mientras que las áreas públicas del complejo ofrecen cinco opciones de restaurantes gourmet, cuatro piscinas, instalaciones de salud y gimnasio, spa, además de un parque de deportes acuáticos y un centro de buceo.
Mientras tanto, la Autoridad de Turismo de Santa Lucía (SLTA) patrocina una vez más el Festival de Jazz de Santa Lucía, un evento musical que trasciende la región caribeña, programado del 6 al 13 de mayo.
El Festival contará este año con una mezcla ecléctica de artistas de jazz internacionales, regionales y locales.
Destacado por eventos y conciertos en toda la isla, el festival de una semana está diseñado como una celebración de la música de jazz de Santa Lucía, del Caribe e internacional, que tiene varios escenarios en diferentes complejos hoteleros anfitriones.
Elogiada por la diversidad de atracciones que reúne en su pequeño paraíso terrenal, presidido por dos curiosos picachos que le dan identidad, parados sobre un litoral de playas de arenas cristalinas, complementadas por una completa red comercial y de servicios, Santa Lucía ofrece un poquito de todo.
Por su curiosa diversidad, en víspera de la actual temporada alta caribeña, el diario británico The Telegraph la presentó a sus con el calificativo de “la opción perfecta para los viajeros que se embarcan al Caribe por primera vez”.
Tal vez eso sea justo para los viajeros ingleses, pero lo cierto es que ya sea Santa Lucía o cualquiera otra de las naciones bañadas por el Caribe, por donde quiera que inicien su contacto, la tentación de probar más los hará volver una y otra vez.