Ryanair: Volar de Londres a Washington por 15 euros

17 de Marzo de 2015 8:22pm
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Ryanair: Volar de Londres a Washington por 15 euros

Años atrás, cuando este redactor le preguntó al CEO de Ryanair, después de una conferencia de prensa, sobre la perspectiva del salto del Atlántico, el irlandés sonrió zorrunamente y respondió: "No está descartado, nunca descartamos nada que sea posible."

Ahora, el dinámico y controvertido Michael O'Leary lo ha hecho de nuevo. Después de haber asegurado en varias ocasiones que su aerolínea sería capaz de vender pasajes entre Europa y los Estados Unidos "desde" 15 euros por asiento, la compañía irlandesa ha anunciado que ha aprobado un plan de expansión que establecerá vuelos entre unas doce o catorce ciudades europeas y otras tantas  norteamericanas.

Según el rotativo británico, 'Financial Times', el director de mercadotecnia de Ryanair, Kenny Jacobs, ha destacado ya las ciudades de las que se prevé partirían los vuelos interoceánicos.

Se trata de Colonia, Berlín, Londres Stansted y el precio de la tarifa 'low-cost' se encontraría entre las 10 y las 99 libras, es decir, entre los 14 y los 139 euros, pudiendo llenar hasta la mitad de sus aviones con asientos más caros. Entre las ciudades de destino, Jacobs mencionó que estarán los aeropuertos norteamericanos de Boston, Chicago, Miami, Nueva York y Washington.

Este ambicioso movimiento expansivo implica que la compañía deberáa dquirir aviones de largo recorrido, y para vencer el desafío de conectar Europa con EE.UU en alas de Ryanair, a O'Leary necesita cerrar un acuerdo con los fabricantes de aviones, básicamente el europeo Airbus y el estadounidense Boeing, que le permita disponer de la flota que va a necesitar para estos vuelos, pues hoy sólo cuenta con aparatos para corta y media distancia.

En esto, les ganó por más de una nariz un precursor, su rival la low-cost Norwegian que ya realiza vuelos transatlánticos y oferta tarifas que arrancan en los 209 euros para un billete entre Londres y Nueva York a bordo de los nuevos Boeing 787 Dreamliner.

Si entra en el mercado de Norteamérica, la compañía irlandesa también competiría con la actual líder europea en estas rutas, IAG, grupo al que pertenece la socia de Iberia, British Airways.

En realidad, en el debate del low-cost trasatlántico, suele olvidarse que hubieron precursores nada afortunados que fracasaron en el intento. Zoom Airlines, la aerolínea canadiense que intentó enlazar Gatwick con Norteamérica, tuvo una muy breve existencia en la primera década del siglo, mientras que el intento de "SkyTrain" de Sir Freddie Laker también fracasó mucho antes, cuando intentó lograr vuelos de bajo precio a los EE.UU en los años 80.

A pesar de todo, el lograr una línea eficiente de bajo costo entre Europa y América ha sido durante mucho tiempo parte del sueño personal de Michael O'Leary, y el mencionado Kenny Jacobs dijo al Financial Times que el transportista irlandés es una marca más grande que esos predecesores e inclusive que Norwegian, y por tanto será capaz de construir una operación low-cost más eficiente y con más tráfico.

Más aún, el directivo afirma que el consumidor europeo anhela viajes de bajo costo hacia los Estados Unidos, e igualmente los clientes norteamericanos lo desean para volar a Europa, y el desarrollo lógico deberá estar primeramente en el mercado europeo.

Debe recordarse que si bien el trayecto trasatlántico es uno de los más rentables en el mundo, ha estado dominado durante largo tiempo por aerolíneas de mayor abolengo como KLM, Iberia y Air France, sin contar las norteamericanas.

Ryanair, sin embargo, ha logrado un incremento en los beneficios después que sus rendimientos mejoraron en forma sustancial, mayormente porque redescubrió y reinventó las ventajas del servicio al cliente, como permitir más equipaje de mano (aunque se lo cobren, los viajeros hacen uso de esta posibilidad), y crear un servicio para clientes de negocios. Estas y otras medidas les posibilita el atraer a nuevos clientes capaces de pagar el costo de un servicio Premium.

Por otro lado, la disponibilidad de vuelos trasatlánticos por sumas relativamente bajas, rondando a los 100 euros, podría atraer a muchas personas, sobre todo europeos, que aún tienen poder adquisitivo para pagarse un viaje, y muchos volarían a los Estados Unidos para disfrutar un largo fin de semana, por lo cual analistas como Gert Zonneveld, de Panmure Gordon, estiman que Ryanair está dirigiéndose a un mercado diferente al tradicional de las low-cost.

Hay muchas preguntas aun sin respuesta - enfatizó- pero pienso que tienen probabilidades de lograrlo, gracias a tener un récord increiblemente fuerte en el negocio de las compañías de bajo costo, ya que desde el punto de vista del costo por unidad, son realmente los de tarifas más bajas.

Por su parte, John Strickland, consultor independiente de aviación, piensa que el éxito en la aventura del vuelo trasatlántico dependerá de que la aerolínea obtenga un buen trato en la compra o alquiler de aviones, porque no sólo se trata de aeronaves, es cómo hacer que cada una proporcione un rendimiento eficiente y rentable, o de otra forma perderían hasta la camisa.

Este tipo de trayecto necesita pescar en una mezcla de clientes, desde los turistas conscientes del costo hasta los viajeros de negocios concienciados para pagar un poco más.

Hoy, siguendo la línea comercialmente agresiva trazada desde hace años, Ryanair se complace en anunciarse como "la única aerolínea ultra-low-cost de Europa, que garantiza las tarifas más bajas en todos sus destinos, poniendo "el avión a disposición de las masas y abriendo a Europa al turismo como nunca antes." Con su flota de 300 aeronaves opera más de 1.600 vuelos diarios en 1.600 rutas desde 57 bases, conectando 180 destinos en 29 países.

Sin embargo, esas "masas" a las cuales Ryanair ha abierto el cielo, se quejan con cierta frecuencia de que la aerolínea irlandesa ejecuta diversas prácticas contra los consumidores, entre ellas el admitir únicamente las reclamaciones en inglés, ignorando otras lenguas oficiales en los países en los cuales opera.

Las organizaciones de consumidores españolas la han denunciado en diversas ocasiones por incumplir la normativa española, a lo cual la compañía ha respondido con denuncias en los tribunales por difamación.

Más aún, en febrero del 2006, la cadena televisiva del Reino Unido, Channel 4, transmitió un documental titulado "Ryanair cogido in fraganti", o "La Cara Oculta del low cost." como parte de su serie Dispatches. El documental criticaba las políticas de entrenamiento de los trabajadores, los procedimientos de seguridad de la aerolínea y la higiene de los aviones, además de la baja moral de los empleados.

Sean ciertas o no esas acusaciones, el tiempo dirá si Ryanair cumplirá con éxito sus ambiciosas propuestas y si para los europeos y norteamericanos será realidad la ilusión de hacer un vuelo trasatlántico por precios tan bajos como los de volar dentro del continente.... y luego, si los pasajeros tendrán que pagar una vez a bordo, por todo, desde el equipaje hasta la comida.

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