Entrevista a Vicente González, Presidente de SIMPOSUB
En la jornada inaugural del VIII Simposio Internacional de la Actividad Subacuática en Cuba conversamos en exclusiva para Caribbean News Digital con el Dr.C Vicente González Díaz, coordinador del Centro de Gestión y Manejo del Patrimonio Cultural y Natural Subacuático de Santiago de Cuba y presidente del Simposio.
Usted que ha sido el investigador y seguidor de este tema, ¿podría decirnos la ubicación y cantidad de pecios que existen en el Parque Arqueológico?
–En realidad, lo que declaramos como Parque Arqueológico no solamente son los pecios de la flota del almirante Cervera. También se incluyen los pecios norteamericanos.
Recordarán que en el 2005 apareció casi fortuitamente, después del embate de uno de los huracanes más importantes que ha azotado a Santiago de Cuba, un pecio en Siboney y después supimos que estaba vinculado al acontecimiento de la guerra hispano-cubano-norteamericana: el Escobo.
Además tenemos en la bahía de Santiago de Cuba el USS Merrimack, un buque carbonero que fue hundido por un comando estratégico de los norteamericanos, el 3 de junio de 1898, en la parte más estrecha del canal de la bahía.
Con este hundimiento pretendían bloquear la salida de la flota del almirante Cervera y apresarla. Esto realmente no fue así. El hundimiento del Merrimack fue en un lugar que no impidió la salida de Cervera y esto cambió la historia. Los restos del carbonero USS Merrimack están a unos 22 metros de profundidad.
Tenemos siete pecios. Unos meses después, en noviembre, los norteamericanos en su posición de vencedores tratan de llevar al buque insignia Infanta María Teresa como trofeo de guerra.
Una tormenta frente a Las Bahamas hunde ese buque y los estadounidenses no pueden lograr su objetivo. En total, tenemos siete sitios arqueológicos vinculados a la guerra hispano-cubano-norteamericana y en Las Bahamas están los restos del Infanta María Teresa.
¿Qué significa para Santiago de Cuba y Cuba la declaración de esta flota hundida como Monumento Nacional?
–Creo que es trascendental. Cuba está adscrita a la convención del 2001 sobre la protección del patrimonio subacuático. Me parece que es una demostración del interés de las autoridades de Cuba y de todos los cubanos en proteger ese patrimonio.
Creo que tienen derecho nuestros hijos, nuestros nietos y las futuras generaciones, de disfrutar estas joyas.
Además, siguiendo todos los preceptos dictados en la convención del 2001, pretendemos que se mantengan in situ y nuestros visitantes puedan también disfrutar de ese patrimonio, en visitas sostenibles, sustentables, con todas las regularidades necesarias para protegerlo, para preservarlo, mantenerlo.
¿La UNESCO toma estos restos arqueológicos como referencia para la posible clasificación de Patrimonio Mundial de la UNESCO?
--Nosotros de inmediato nos ponemos a trabajar en la inscripción de este parque arqueológico por su diversidad y la importancia que tiene. Ese acontecimiento marcó un hito en la historia del mundo.
Ese 3 de julio de 1898 a la 1:35 p.m., bajo el sol abrasador y al amparo del Pico Turquino, se hundía el Cristóbal Colón. 400 años antes, ese nombre había ayudado al imperio español a crecer. No solamente los españoles perdían Cuba, perdían América y su hegemonía en el mundo. Sin lugar a dudas, surgía un nuevo imperio: el norteamericano.
¿Esta situación de los buques puede influir en la entrada de los cruceros en la bahía de Santiago de Cuba en cuanto a la profundidad?
--No hay ningún tipo de problema. En realidad, el único de estos pecios que está dentro de la bahía es el Merrimack y está al este del canal, en un lugar donde no impide la entrada y salida de los buques, incluso de bastante calado.
Aprovecho la oportunidad para decirle que es un espectáculo extraordinario cuando se está trabajando sobre la cubierta del Merrimack y pasa un barco por la superficie. Es una experiencia muy interesante.